Nosotros, los que amamos, los insaciables, los soñadores eternos. Nosotros, los melancólicos, los que lloran el atardecer, los que no pueden dormir. Nosotros, los que nacemos y morimos cada amanecer, en suspiros, en besos, en caricias que faltan, en ausencias que sobran. Nosotros, los que traemos el amor a cuestas, recargando el corazón por alguna esquina, abriendo puerta por puerta. Encontramos, huyen. Nos encuentran, huimos. Qué carrera tan masoquista, que pasatiempo es este, desgastarnos en madrugadas solitarias, deseando compañía, manos compañeras, pupilas que se reconozcan, respiraciones que calmen la taquicardia que deja abrazar el vacío. Nosotros, los que amamos, nosotros.
jueves, 26 de septiembre de 2013
domingo, 22 de septiembre de 2013
Amores de cartón.
Era demasiado amor. Demasiado grande, demasiado complicado, demasiado confuso, y arriesgado, y fecundo, y doloroso. Tanto como yo podía dar, más del que me convenía. Por eso se rompió. No se agotó, no se acabó, no se murió, sólo se rompió. Se vino abajo como una torre demasiado alta, como una apuesta demasiado alta, como una esperanza demasiado alta.
viernes, 20 de septiembre de 2013
jueves, 12 de septiembre de 2013
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